- Deposición húmeda: La lluvia, niebla y nieve ácida. El daño que cause dependerá de qué tan ácida sea, de la capacidad de amortiguación del suelo receptor (el suelo involucrado) y de qué tipo sean los seres vivos a los cuales afecte.
- Deposición seca: Gases y partículas ácidas. Será trasportada por el viento.